Aportar un proyecto sólido, estructurado y de larga duración que atienda las necesidades específicas de los niños, niñas y jóvenes de cada uno de los contextos en los que se implemente.
Transmitir a las respectivas comunidades la importancia de los proyectos no tanto desde su vertiente deportiva, como sobre todo por los procesos educativos integrales que fomenta.
Empoderar a los niños y a las niñas expuestos/as a dinámicas de riesgo social y discriminación que se encuentran en posiciones de desigualdad y exclusión social por razones de pobreza, delincuencia, integración y/o género.